Cuando el poema, antes de escribirse, está claro en la mente del poeta del primer al último verso, el poeta se convierte en cartero, y la imaginación en bicicleta.
El camino al significado, por largo y laberíntico que sea, es el viaje del poeta. Si se extravía en las sombras, se orienta de nuevo.
¿Qué es el significado? No lo sé. Pero atisbo su contrario: conformarse con la nada.
El dolor no es un don, es una prueba: o te vence o lo vences.
La poesía bella… es un acto de resistencia.
Acervo vivo es el que se escribe hoy… y mañana.
Un gran poeta es el que me hace pequeño cuando escribo… y grande cuando lo leo.
Camino entre Homero, al-Mutanabbi, Shakespeare… y me tropiezo como un camarero novato en una recepción real.
La nube en la imaginación del poeta… es una idea.
La poesía… ¿qué es? Aquello que, una vez leído o escuchado, nos hace exclamar: ¡Esto es poesía! Sin necesidad de pruebas.
Mahmud Darwix: La huella de la mariposa (Ázar al-faracha, Beirut, Riad El-Rayyes, 2008)
Traducción de Luz Gómez García
Fuente: Mahmud Darwix, Blog de Luz Gómez