Mauro Salazar J. y Carlos del Valle / Medios y pos-hermenéutica en la obra de Friedrich Adolf KittlerMedios y pos-hermenéutica en la obra de Friedrich Adolf Kittler

Filosofía

De ahí que la “Postal de Derrida” consista en un flujo continuo de cartas mecanografiadas puntuadas por llamadas telefónicas que se mencionan con frecuencia, pero nunca se registran. La voz sigue siendo la otra de las mecanografías. F.K. Gramófono, 1979.

En virtud de las barreras idiomáticas, y un subdesarrollo epistémico en la región, la obra de Friedrich Adolf Kittler, (1943-2011), no ha sido relevada a la fecha como un “pensamiento de fronteras”, dejando una colosal huella, un vacío, para las “humanidades mediales” en plena era geológica*. Kittler, “especie de Derrida de las máquinas”, analiza las intersecciones entre arte y tecnología, estética y epistemología, cuestión que trasciende los enfoques fenoménicos y sus “atajos cognitivos” para comprender las técnicas, desplazando la distinción foucaultiana entre prácticas discursivas y esferas no lingüísticas mediante una ontología de los objetos ampliando las posibilidades de la infraestructura del sentido y los medios. El teórico de las máquinas toma distancia del a priori histórico de Foucault en la Arqueología del Saber (1969)  y subraya la dimensión tecnológico-medial.

Aldo Bombardiere Castro / Estallar

Filosofía, Política

El estallido sólo designa su modo de darse: la irrupción de lo incontenible. Lo que estalla, ya sea que explote o implosione, lo hace súbitamente. Estallar es, antes que una acción, la forma que esta toma.

Algunos creen que aquello que estalló el 18 de octubre de 2019 fue la sociedad, o la ya insostenible ira de las personas por vivir en una sociedad del consumo sin los medios suficientes para consumir. Así, ellos se apresuraron a atribuir las causas del llamado “estallido social” a un malestar por defecto, a un malestar por carencia: como no todos pueden gozar de la fiesta del consumo, el problema no residiría en el capitalismo, sino en aquello que impediría al capitalismo. En suma, para ellos, lo que estalla es el resentimiento vestido de violencia: la impotencia.

Mauro Salazar J. y Rodrigo Uribe / Eslabones. Nouveaux Philosophes y estéticas frenteamplistas

Filosofía, Política

La izquierda reformista en 1970 y la sobreabundancia de mitos y disputas hermenéuticas abren lecciones sobre ideología, estética y campo hegemónico. La vía italiana y las lecciones de “bloque” extraídas desde la Unidad Popular. Antes, la crítica al Mayo Francés, y las afirmaciones hiperbólicas de los “nuevos filósofos”. Guy Lardreau sostenía que no habría futuro si la izquierda ganaba las elecciones, denegando toda posición afirmativa. Mitterrand asumió el poder en 1981, y los intelectuales antitotalitarios -refractarios de Mayo- volvieron a denunciar las amenazas que representaba para la libertad la presencia de varios ministros comunistas en el nuevo gobierno. Enrico Berlinguer y su célebre “Lecciones de Chile“, advirtiendo que la “vía pacífica” carecía del momento hegemónico. El ineludible tributo a la obra de Antonio Gramsci allende los andes. Los años del plomo en Italia y la caída del “compromesso Storico” tras el secuestro de Aldo Moro (DC) a manos de las “brigadas rojas”. La experimentación del Eurocomunismo y la irrupción de los teóricos del éxodo bajo el (post)operaismo -Negri, la militancia, la praxis y un largo exilio- para contrarrestar la crisis del obrero masa, y la debacle insalvable del marxismo vulgar.

Giorgio Agamben / En memoria de Toni Negri

Filosofía

Dos noches antes de que me llegara la noticia de la muerte de Antonio -de Toni- Negri, soñé con él durante mucho tiempo y su presencia era tan vívida que al despertar sentí la necesidad de escribirle. Mi mensaje al viejo correo electrónico que no utilizaba desde hacía años no pudo llegarle. Cuando le conté el sueño, una amiga me dijo: «quería despedirse de ti antes de irse». Incluso en la divergencia de nuestros pensamientos, cada vez más clara con el tiempo, algo nos unía obstinadamente, algo que tenía que ver ante todo con su vitalidad generosa, inquieta y puntillosa, que sentí de inmediato cuando lo conocí por primera vez en París en 1987.

Gerardo Muñoz / Nombre y libertad

Filosofía, Política

En el otoño de 2020, discutimos un libro de Rodrigo Karmy titulado Intifada: una topología de la imaginación popular (2020), que reparaba en las implicaciones que conllevan las formas de las revueltas contemporáneas para la imaginación común. Se ha dicho con buenas razones que los controles administrativo-sanitarios desplegados durante la pandemia de COVID-19 neutralizaron el ascenso de revueltas surgidas del descontento experiencial al interior del tejido social. El desgaste y la domesticación de la experiencia probaron, al menos por ahora, su eficacia sigilosa así como su éxito unilateral. Sin embargo, lo que algunos de nosotros no vimos en ese momento fue que esta energía de contención prolongada también se estaba aplicando a la sustancia misma del lenguaje. Esto ahora se ha hecho ostensible, a raíz de los recientes acontecimientos en los campus universitarios donde autoridades administrativas, escritores de opinión y analistas legales han sugerido que una palabra en particular, “intifada”, debería proscribirse y borrarse de la vida universitaria. No vale la pena considerar aquí la etimología, el alcance semántico o el despliegue político de este término —para esto ya existe la elegante y densa articulación del término elaborada por Karmy.

Giorgio Agamben / ¿Soy armenio, soy italiano?

Filosofía

Mi relación con Armenia -ante todo con la lengua armenia- tiene algo de íntimo y de legendario. Hace muchos años, Gianfranco Contini, un filólogo al que tenía y tengo en la más alta estima, me dijo que el apellido Agamben es sin duda de origen armenio. El apellido armenio Aganbeghyan se acortaría a Agamben, al igual que el apellido italiano Gianni deriva del armenio Gianighyan. Esto me lo confirmó más tarde, no sin cierta sorna, un monje del convento de la Isola degli Armeni de Venecia. En las tradiciones de mi familia, sin embargo, no había rastro de tal origen y el nombre -que somos los únicos que lo tenemos en Italia- se explicaba de otras formas más fantásticas, tal vez inventadas para ocultar el origen exótico.