I. Relieve
Para comenzar, se quisiera relevar el siguiente pasaje de Catherine Malabou que, pensamos, es el gesto filosófico que se disemina en toda su obra (o podría) y que será, de igual forma, un principio filosófico mayor; una estructura fundamental del pensamiento, si se quiere.
Escribe en su libro ¡Al ladrón! Anarquismo y filosofía “¿Cómo cavar el relieve de una diferencia en la superficie?”1.
El pasaje no se revela por sí mismo. Hay, justo, que “cavar”. Va de intuir geografías e intensidades simultáneas, napas subterra y agenciamientos superficiales, dérmicos; todo ocurriendo en el sobresalto de una genealogía supuesta en la que encontraremos –o no– alguna respuesta; genealogía en “relieve” que es, sin embargo, el exceso de una diferencia; la suplementariedad en la que se resuelve la ausencia de cualquier repetición y en la que hacemos frente a la singularidad absoluta.
