‘‘Paredón a media noche’’ se erige desde la experimentación sonora entre una guitarra eléctrica y un sintetizador, con el fin de proyectar una atmósfera lúgubre, ya que intenta recobrar las crónicas que expirarían en el olvido -o el espanto- a consecuencia de su razón.
La selva peruana se desangraba durante los años 80’s y 90’s. La violencia era incesante desde todos los bandos y el género humano parecía no tener remedio, especialmente en aquellos que ejecutaban a sus similares cada medianoche en un prominente paredón en medio de la Cordillera escalera (actualmente carretera Tarapoto – Yurimaguas). No existía enemigos ni aliados, la violencia era desatada con la misma crueldad por parte de las Fuerzas armadas, Policía, grupos Paramilitares de ultraderecha, narcotraficantes y terroristas.