Carlos del Valle R. y Mauro Salazar J. / Genealogía de un laissez faire Oligarquizante

Filosofía, Política

La tradición no es una cosa que se recibe, sino que se gana con esfuerzo; encierra el sentimiento de la historia, es un sentimiento de la historia en el que se unen el tiempo y aquello que trasciende al tiempo, y es lo que hace que el hombre [sea] tradicional” TS Eliot, 1919.

Luego del orden fáctico implementado bajo la “modernización pinochetista”, el conservadurismo de la vieja república -1938/1973- no puede ser imputado desde un continuum con las premisas que inspiraron el programa encabezado por los Chicagos Boys (1976). No existe una relación evidente entre pensamiento conservador y partidos de derechas. De otro modo, abundan mixturas e indicios de conservadurismo libidinal, centrista o de izquierdas. También existe revolución conservadora.

Carlos del Valle y Mauro Salazar J. / La kastización del mundo. Octubrismo y parto Republicano

Filosofía, Política

La razón fundamental que explica esto es que hoy no tenemos un presidente. Sebastián Piñera es una figura fantasmal, ronda los pasillos de La Moneda y de cuando en cuando aparece con declaraciones desafortunadas y lamentos extemporáneos. Pero su liderazgo es inexistente y su capacidad de dirección ejecutiva ausente” El Líbero, marzo de 2020.

A semanas del apabullante estallido electoral en favor del Partido Republicano se agolpan una serie de textos e imágenes que nos llevan a ocuparnos de las incertidumbres de diciembre (2023). Todo transcurre una vez que los elencos de la post-transición experimentan una drástica reducción demográfica y un vacío discursivo-programático. ¿Fin de ciclo? Aludimos a una orfandad hermenéutica, donde ni siquiera el “tiro de gracia” que le propinó Repúblicano al clivaje PPD/DC -Concertación-, pudo ser capitalizado por un campo de izquierdas (AP) sin disputa ideológica, relatos, ni potencia imaginal. El bullado proyecto que encabeza José Antonio Kast (JAK) y los enigmas de su sociodemografía, de innegable inserción en un sentido común nihilista y colérico, obligan a sopesar sigilosamente las posiciones o nudos ideológicos que harían plausible un nuevo «pacto social» (texto Constitucional) con una socialdemocracia absorbida en la administración y capturada en la gestión. Lo último agravado por obra y gracia del propio partido que lidera JAK y su promesa refundacional que se avalancha para disputar la hegemonía de la política post-transicional.