Miguel Ángel Hermosilla / Sobre La religión de la muerte. Post scriptum sobre viejos y nuevos fascismos de Julio Cortés Morales.

Filosofía, Política

El capital llega al mundo chorreando sangre por todos los poros”. Karl Marx.

La religión de la muerte. Post scriptum sobre viejos y nuevos fascismos, es el más reciente libro de Julio Cortés Morales. Fue publicado por la Editorial Tempestades en agosto del 2023. Se trata de un texto intenso que interviene en el debate y la discusión acerca la irrupción de los fenómenos neofascista o postfascista del siglo XX y XXI a partir de una aproximación analítica y critica de los fascismos históricos, “aquel que la literatura liberal ha llamado totalitarismo”:

Coincido parcialmente con Gentile en cuanto a que solo identificando seriamente al fascismo histórico es posible entender en qué medida estamos hoy ante el riesgo de aparición de expresiones equivalentes en nuestro tiempo y bajo qué nuevas formas. Pero creo que no existe una sola forma de fascismo histórico, sino un amplio campo de movimientos fascistas. “La religión de la muerte”. Julio Cortés Morales”

Giorgio Agamben / Nieve en Rumanía

Filosofía, Política

¿A qué somos fieles, qué significa tener fe? ¿Creer en un código de opiniones, en un sistema de ideas formulado en una ideología o en un «credo» religioso o político? Si así fuera, la fidelidad y la fe serían un triste asunto, nada más que el deber monótono y complaciente de cumplir unas prescripciones a las que por alguna razón nos sentimos vinculados y obligados. Una fe así no sería algo vivo, sería letra muerta como la que el juez o el policía se sienten aplicando en el cumplimiento de sus deberes. La idea de que el creyente es una especie de funcionario de su fe es tan repugnante que una muchacha, que había soportado torturas para no revelar los nombres de sus compañeros, a quienes elogiaban su fidelidad a sus ideas respondía simplemente: «No lo hice por eso, lo hice por capricho».

Sergio Espinosa Proa / Del primer Deleuze

Filosofía

El presente artículo aborda las primeras obras de Gilles Deleuze desde el ángulo que a él mismo le han merecido. Utiliza los textos, prólogos y entrevistas aparecidos en La isla desierta y otros textos (1953-1974), para proponer un comentario cuyo interés de fondo es la pregunta por la filosofía cuando a esta, sin ignorarlas, no le da por imitar a las ciencias positivas ni se presenta como sustituto de la religión.

Ángel Octavio Álvarez Solis y Gerardo Muñoz / La iglesia sin fin

Filosofía, Política

El presente está encarnado en una disrupción teológica. Contra los entusiasmos del secularismo moderno, la teología ha estado presente en la estructura profunda del mundo. Por esta razón, no hablamos en parábola si dijésemos que una de las crisis que atraviesa el presente es de naturaleza profundamente teológica. Teologías en combate permanente. Crisis de nuestros arcanos más remotos. Que un medio de elites tan autorizado como Financial Times recomiende a la clase bancaria que “realice el trabajo de Dios” no es un titular altisonante ni un lapsus freudiano, sino el índice del malestar contemporáneo destilado como deber [1]. La teología sigue, aunque la iglesia se oculte. Cuando decimos “una crisis teológica” es inevitable remontarse al vínculo estrecho entre crisis, teología y apocalipsis, cuyo eón probablemente estemos tramitando en su momento de desintegración. Aunque es siempre difícil advertir el “final de los tiempos”, el reconocimiento del “tiempo del fin” aparece como ladrón en la estela de la noche. ¿Qué ocurre cuando San Pablo sale del escenario mundial? Alguien toma su lugar, y algo acecha. Los bancos administran el otro mundo. Esto lo supo muy bien alguien tan atento a la estructuración técnica de lo moderno como Günther Anders, quien llegó a escribir que ya no podemos decir que estamos a la espera de un final del tiempo, sino más bien que ya estamos en “tiempo del fin”, puesto que carecemos de las certezas espaciotemporales mínimas: somos incapaces de dotarnos de otro sentido de futuro para el mundo de la vida [2].

Giorgio Agamben / Sobre el fin del mundo

Filosofía

El tema del fin del mundo ha aparecido varias veces en la historia del cristianismo y en cada ocasión han comparecido profetas anunciando como próximo el último día. Es extraño que hoy esta función escatológica, que la Iglesia ha dejado caer, haya sido asumida por los científicos, que se presentan cada vez más a menudo como profetas, que predican y describen con absoluta certeza las catástrofes climáticas que conducirán al fin de la vida en la tierra. Singular, pero no sorprendente, si se considera que en la modernidad la ciencia ha sustituido a la fe y ha asumido una función propiamente religiosa -es, en efecto, en todos los sentidos, la religión de nuestro tiempo, aquella en la que los hombres creen (o, al menos, creen que creen).

Abdennur Prado / El tiempo de la revelación y la filosofía de la historia

Filosofía

El modelo básico de una hipotética “filosofía islámica de la historia” solo podría estar basado en el ciclo de la profecía: el Dador ha enviado sucesivos profetas a la humanidad, para recordar a los humanos un pacto primordial e interior a cada criatura. Pero este no es un pacto que la divinidad haya establecido con nadie en concreto en un momento concreto de la historia. De ahí que el Corán lo sitúe en el tiempo meta-histórico y lo haga extensivo a toda la humanidad:

Y cuando tu Sustentador sacó de las espaldas de los hijos de Adán
a su propia descendencia y les hizo que dieran testimonio:
¿Acaso no soy Yo vuestro Sustentador?
Contestaron: “Sí, lo atestiguamos”.
(Corán 7:172)